Diagnóstico clínico o sindrómico.

       Diagnóstico de lesión neurológica.

       Diagnóstico topográfico.

       Diagnóstico etiológico.

       Diagnóstico diferencial.

       Causas de parálisis facial.

   

                                                                  
   DIAGNOSTICO CLINICO.
   El diagnóstico clínico positivo en general no va a plantear problemas. Se basará en la anamnesis y la exploración física, requiriendo pocas veces de pruebas complementarias para su confirmación: el 95% de las PF pueden ser diagnosticadas por la historia clínica y la exploración física.
   ¿Cuando se pueden presentar dudas?
   En casos de disfunción moderada, situación que es más frecuente en los niños en los que pueden pasar desapercibidas, y en las formas de comienzo de las PF progresivas no idiopáticas.
   El diagnóstico de la PFI, teniendo en cuenta su carácter de patología idiopática, lógicamente es un diagnóstico por exclusión, al no evidenciarse causas conocidas de PFP. Este carácter negativo del diagnóstico implica que en algunos casos se pueda considerar como idiopática casos de PF de etiologías concretas, que en un principio no se sospecharon, o bien, que en la evolución del proceso no se han podido descubrir. En la PFI los resultados de las pruebas complementarias serán siempre normales, excepto las que evalúan la función del NF.
  
                                   
   DIAGNOSTICO DE LESION NEUROLOGICA.
   El diagnóstico de lesión neurológica lo proporcionan las pruebas electrofisiológicas: pueden diferenciar entre neuroapraxia y axonotmesis o neuronotmesis, pero no pueden diferenciar entre axonotmesis y neuronotmesis.